Manual de Museología para Museos Escolares

Proyecto ganador de estímulos económicos para la cultura 2019

mincult
Facebook
WhatsApp
Twitter

EL TALLER DE PINTURA PATRIMONIAL EN EL DISTRITO DEL RÍMAC

Disfrutar y aprender a través del arte

¡Hola a todos!

Creemos que aprender a dibujar y pintar es más que incentivar la creatividad; es una ventana para observar y reflexionar sobre temas diversos, desde la figura humana hasta el paisaje. Cada trazo nos permite explorar y conocer de cerca lo que representamos.

Por eso, organizar talleres de arte para los más jóvenes, especialmente al aire libre en un entorno patrimonial, se convierte en una experiencia única. Va más allá de aprender técnicas artísticas; es una oportunidad para descubrir el valor histórico y las peculiaridades de nuestro espacio cultural.

Permítenos compartir contigo la experiencia de «Pintando el Paseo de Aguas», un taller de arte para los pequeños del Rímac, donde crearon su visión única del patrimonio cultural de su distrito limeño.

Un grupo de entusiastas, conformado por más de diez niños acompañados de sus madres, se reunió el jueves 15 de febrero en el Paseo de Aguas. Desde las 10 de la mañana hasta el mediodía, bajo una carpa que nos protegía del sol, teníamos a nuestra disposición cartulinas, lápices, témperas y pinceles.

Mientras los niños exploraban su creatividad, las madres participaban activamente. Bajo la sombra de la carpa, compartíamos no solo pinceles y colores, sino también historias sobre el Paseo de Aguas. ¿Sabías que el virrey Manuel Amat y Junyent inició su construcción en 1870 como parte de su propuesta de modernización de espacios públicos? Aunque no pudo concluir su obra, el arco central, que los niños observaron y pintaron, quedó como testamento de su visión.

Otro dato curioso surgió cuando una madre mencionó la tradición de Ricardo Palma sobre el origen del Paseo de Aguas: creado por el virrey para reflejar la luna en los pies de su amada Micaela Villegas, la Perricholi. Más de 250 años después, el monumento sigue siendo testigo de festividades, ferias y hasta el bautizo del famoso Cristo Cholo el año pasado en Semana Santa.

Exploramos el pasado a través de imágenes antiguas y pinturas, como la acuarela de José Alcántara la Torre, que capturó el atardecer en 1915. Los niños observaron cómo cambió el lugar con el tiempo, apreciando no solo las diferencias sino también la libertad de color y destreza del artista.

Una puesta de sol en el Paseo de Aguas. José Alcántara La Torre (Trujillo 1893 – Lima, 1978) Acuarela sobre papel, 1915

En el taller se habló sobre la perspectiva, la simetría y la combinación de los colores que predomina en el monumento. Se identificó algunos elementos arquitectónicos: arcos, pilares, óculos y pináculos. Para ello trazamos unas líneas horizontales, sobre la cual dibujamos un arco central y tres arcos más pequeños a ambos lados. Observamos los elementos: la fila de óculos, esas ventanas ovaladas que van sobre los arcos y las representamos. Luego sobre ellas los pináculos esas estructuras en punta.

Del dibujo pasamos al color, empezamos a combinar los colores, a hacer manchas y a resaltar algunos elementos. Cada niño lo hacía a su manera, con libertad y cada pequeña obra fue original.

Este taller, liderado por Teresa Arias Rojas, fue posible gracias a la Municipalidad del Rímac y el Proyecto de Mejoramiento del Centro Histórico del Rímac del Ministerio de Cultura, en celebración del 104 aniversario del distrito.

¡Gracias por ser parte de esta aventura creativa en el corazón del Rímac!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Otros proyectos museales